Patatas con costilla
Las patatas con costilla son ideales en cualquier época del año, ya que es un plato consistente, una comida de lo más tradicional, de toda la vida, ideal como plato único y una receta que puede hacerse con pocos ingredientes y muy comunes. Lo he condimentado con especias y condimentos muy españolas (nada de curry, wasabi o jengibre): ajo, pimentón, orégano y laurel. Ahora que ya empezamos a tener algún día más fresquito, ya apetece comer estos platos más contundentes y calentitos. ¿No os pasa a vosotr@s que ya echáis de menos los platos de invierno?, ¿o seguís prefiriendo las recetas fresquitas del verano?
Ingredientes (para 4 personas):
- 800gr de patatas
- 800gr de costilla de cerdo
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharaditas de pimentón
- 1 tomate natural triturado
- 1 cucharadita de orégano
- Una hoja de laurel
- ¾ litro de caldo de carne
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
Salpimentamos las costillas y las marcamos en la olla con aceite. Procurad que queden bien doraditas, porque así la carne no se deshace cuando la pongáis a cocer.
Pelamos y machamos en el mortero los dientes de ajo y los añadimos también a la carne. Removemos para que se mezcle bien.
Mientras la carne se dora, pelamos y cortamos las patatas en trozos (de manera que crujan, en cachelos, como dice mi madre, porque así quedan más ricas, ya que sueltan el almidón y también ayuda a espesar el caldo sin necesidad de añadir harina).
Cuando la carne esté lista, añadimos el pimentón, el tomate, el orégano y las patatas, removemos bien y añadimos el caldo de carne (mejor caliente). Si no tenéis caldo de carne podéis cambiarlo por una pastilla de caldo de carne y agua (no será lo mismo, pero tampoco os quedarán mal).
Cerramos la olla y esperamos a que haga la presión, bajamos el fuego y las dejamos 20 minutos. Cuando la válvula baje: ¡a comer!
